Títeres en la plaza

Ayer hubo una especie de mercadillo en la Smithfield plaza, muy chulo, sobre los jardines y la biodiversidad de especies en Irlanda. Había puestecillos de comida, perritos calientes, comida turca, pasta y salsas italianas, jamón de guijuelo (si, si, de guijuelo, cortado por un chico de Madrid y a 11€ los 100 gramos...), también había un puesto de fudge, una especie de dulce similar al turrón, había otro de aromaterapia, también de ropa milticolor hecha a mano... En fin, había de todo, y en todos o casi todos ofrecían para probar, así que catamos todo lo que nos pareció oportuno, acompañado de una botellita de 7up que repartían también gratis. En dos turnos, a las 13:30 y 15:30h, enseñaban al personal a trasplantar y a cuidar unas plantitas que también regalaban (a nosotros nos regalaron unas semillas de flores irlandesas que marcharon para España, a ver si allí crecen...), aunque esto parecía interesar más bien poco al irlandés de "a pie" más preocupado de su pinta que de otra cosa, y sólo se acercaban niños. Que curioso este mercadillo...

Ya se que hace mucho que no escribo, pero "los abuel" estuvieron esta semana de visita y no he tenido demasiado tiempo para contar cosas, aunque la verdad es que podría hacer un resumen en dos lineas como asostumbro y quedarme tan ancha. Lo que sí diré es que nos ha llovido todos los días, pero todos, todos, menos ayer que salió el sol. Además ha hecho muchísimo viento (un airón, como diría yaya), así que no parecía verano. Pero al menos, aunque no podíamos salir todo lo que nos hubiera gustado, hemos jugado mucho con Jimena en casa, quien por cierto ya camina solita, se desequilibra porque lleva la cabeza muy adelante y porque además quiere correr más de lo que le dan sus piernas pero aun no ha tenido ningún percance relevante. Lo que sí es que ahora hay que andar con cienes y cienes de ojos, porque se escapa en cuanto nos descuidamos y si no vamos deprisa ya es demasiado tarde y se ha dado de morros contra el suelo. Y aquí acaba el resumen, que no tengo ganas de más. Por cierto, en este tiempo Jorge ha ido a una boda protestante aquí en Dublín (que la cuente él si quiere), y a un congreso en Cardiff en el que ha dado una charlilla... así que por lo que se ve es él el que más novedades puede contar ;-D

Por mi parte, siguiendo la receta de Fredi y aprovechando algunas de las frambuesas que compramos en el mercadillo (también había un puestecillo de bayas), he hecho unos muffins de frambuesa, en lugar de los blueberries que usa él y sin la cobertura crujiente, porque ya me parecía demasiado trabajar (soy un poco vaga, jeje). El caso es que no han quedado del todo mal, aquí planto una foto para dar envidia...

Y esto es todo por el momento...