La semana

¡Acabo de bañar sola por primera vez a Jimena!
Pensareis que es una tontería, que cómo no lo he hecho antes, pero la verdad es que me ha costado atreverme porque ponerle la "tapa" a la bañera, vamos, lo que es el cambiador, con la niña en brazos envuelta en la toalla, pues me era bastante complicado, pero hoy, mientras Jorge ha ido al aeropuerto a por Félix, pues me he decidido a hacerlo.
He de confesar que al principio pensé no bañarla, pero se estaba poniendo tan pesada, vamos, lo normal a estas horas de la tarde, que se empiezan a poner ya un poquito inaguantables, y he dicho, ¡ala! ¡a la bañera! Y no se nos ha dado muy mal que digamos, de hecho luego se ha tomado el bibe, luego teta y a las 10 menos 10 estaba durmiendo en su cunita.
Me he dado cuenta de que hace ya casi una semana que no escribo, ¿será que he estado ocupada? Bueno, pues sí, debe ser eso... La verdad es que el fin de semana tuvimos "plan", así que no me dio tiempo a escribir...
El sábado nos dedicamos a pasear y a arreglar un poco la casa, hacer la compra y eso, y el domingo salimos a comer con Plunkett y Shirley, su novia (que por cierto, nos han invitado a su boda, pero sólo ira Jorge, ya que los niños no están invitados y yo me quedaré con Jimena con mucho gusto, ya que no conozco a nadie y no me apetece demasiado ir) y con otra pareja que también se casan. Imaginareis que el tema de conversación era las bodas y los bebés... Comimos en la iglesia-pub, el menú bastante escaso, pero los postres estaban muy ricos y luego vinimos a casa a tomar café para así dar de merendar a Jimena. En el camino nos calamos hasta los huesos, y eso que a la salida del pub no llovía y no vivimos demasiado lejos, pero se puso a caer con ganas. Jimena tenía que merendar pera, que parecía que le había gustado el día anterior, pero se puso a hacer ascos y le daban como arcadas, así que la dí un biberón y arreglado. Dada la excitación que llevaba acumulada, de estar con gente a la que no conocía en un sitio desconocido también, cayó rendida enseguida, pero vamos, que tampoco duró demasiado... las famosas "siestas de minuto".
El lunes fue el cumple de tía Ana, que muy amablemente llamó para que la felicitásemos, jeje, y el lunes también empezamos a darle manzana a Jimena. Se tomó media mezclada con un poquito de cereales, porque Jorge decía que estaba un poco ácida, pero la dí un trocito para que lo chupara y no parecía disgustarle... Desde entonces seguimos dándole manzana de merendar y la primera cucharada no le hace gracia, creo que porque se piensa que es el puré, pero luego abre la boquita con mucho gusto.
El martes fuimos a yoga, como siempre, pero Jimena no estuvo muy por la labor de seguir la clase, así que, como si no hubiéramos ido. Normalmente después de la clase se suele dormir y así yo como tranquilita con el resto de las mamás, pero no, parece que eso tampoco la apetecía, así que me tocó comer con ella en brazos. Luego nos vinimos a casa Bea e Irene y Magda (una amiga de Bea) y Sophia (su nena de 3 meses), a tomarnos una infusión fantástica de frambuesa que descubrí en casa de Bea (¡gracias, Bea!).
El miércoles no recuerdo muy bien lo que hicimos, ¡y eso que fue ayer!, así que no debió ser un día muy interesante, y hoy...
Bueno, pues esta mañana hemos ido a buscar a Bea e Irene que los jueves van a clase de masaje infantil y nos hemos venido al Fresh a tomarnos un cafelito. Como Jimena estaba despierta, y en la silla como que no la gusta demasiado estar, pues la he puesto en una trona muy chula que tienen allí, y parece que no estaba descontenta, así que se ha estado sentadita jugando un ratito con sus juguetes. Luego, cuando hemos vuelto, Jimena se ha dormido, se ha saltado su hora de la comida y así he comido yo tranquilamente, y luego, pues bueno, como todos los días, se ha comido el puré, ha estado jugando en el parque, luego ha merendado la manzana ¡y el resto ya lo sabeis!
Y ala, con esto y un bizcocho, ¡hasta mañana! (espero que más tarde de las 8, jeje) Yo me voy a "enpiltrar", aunque éstos aun no han venido, pero es que ya me caigo de sueño, y el capitulo de Cuentame es repetido, así que... lo dicho, ¡al sobre!