Cada vez escribo menos, la verdad, sintiéndolo mucho, porque me encanta poder contaros cositas, pero el tiempo escasea, y hay cosas prioritarias, sobre todo, descansar :-)
En primer lugar contaros que sólo queda un mes para que nuestra pequeña Aldara cumpla un añito, ¡cómo pasa el tiempo! A sus once meses, Aldara se ha vuelto un pequeño terremoto. No deja títere con cabeza, a pesar de que parecía un bebé la mar de tranquilo, las cosas han cambiado enormemente. Sigue sin hacer un gran alarde de actividad, pero desde luego que nada que ver con lo que era antes.
Ahora gatea con un estilo muy peculiar, pero que le sirve igualmente para desplazarse por nuestro enorme pasillo, y se intenta poner de pie, agarrada a cualquier mueble (con el peligro que conlleva), para coger lo que haya encima. El mando a distancia, las llaves, vasos, móviles o papeles varios, cualquier cosa tiene un interés especial, y sobre todo los DVD que hay en la estantería, los alcanza y examina con un enorme cuidado. Abrir cajones o armarios es otra de sus aficiones favoritas, y por supuesto sacar cualquier cosa que haya dentro.
Además tiene un arte especial también para el baile. En cuanto oye música menea su cuerpecillo, cabeza incluida, con gran salero. Me encantaría enseñárosla, porque es muy graciosa, pero nunca se sabe cuando lo hará, así que aun no me ha pillado con la cámara a mano ;-)
Lo que está claro es que tiene un peligro… pero es encantadora, ¡qué voy a decir yo!
Y nada, hasta la próxima, que espero sea prontito.
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